¿Cómo funcionan las placas fotovoltaicas?

Cada día más españoles instalan energía solar en sus viviendas, es una energía que se está popularizando rápidamente gracias a la bajada de precio exponencial desde su lanzamiento, además de gracias a las subvenciones que ofrece el Estado. A su vez, cada vez más personas las quieren tener en sus tejados porque consiguen abaratar a más de la mitad su factura de la luz, al mismo tiempo que cuidan el medioambiente ya que es una energía limpia, renovable y gratuita, pero ¿sabemos cómo funcionan las placas solares? ¿Cómo consiguen transformar los rayos del sol en energía útil para nuestras viviendas? Continúa leyendo que nosotros te lo explicamos

¿Cómo generan energía las placas solares?

Seguro que todos aquellos que cuentan con una instalación solar en su vivienda, o que están investigando para realizar una, más de una vez se han preguntado cuál es el mecanismo detrás de las placas solares. Te lo explicamos de forma sencilla, cuando los rayos solares chocan contra las placas fotovoltaicas unos materiales semiconductores se encargan de transformar la energía de los rayos solares en electricidad.

Estos materiales semiconductores de los que hablamos se encuentran en las celdas solares, las encargadas de transformar la luz del sol en electricidad. Estas celdas solares son pequeñas células hechas de silicio cristalino o arseniuro de galio. Estos dos materiales están mezclado con otros componentes, como el fósforo o el boro. A través de esta mezcla, cuando la luz solar (energía lumínica) incide sobre las placas solares, mueve los electrones (energía eléctrica) consiguiendo crear una corriente continua de electricidad y energía. Una vez obtenemos una corriente continua de las placas solares, estas la envían al inversor de la instalación, para transformar esa energía continua en energía alterna, aquella utilizada en nuestras viviendas.

Tipos de placas solares

Actualmente existen tres tipos de placas solares que, según cómo estén compuestas, van a ofrecer un mayor o menor rendimiento a la instalación.

• Monocristalinas: Estos paneles solares están compuestos por un solo cristal. Actualmente rinden entre un 15 y un 25% más que las demás placas del mercado. Esto se debe a que el silicio de las células solares se corta en láminas, de manera que es más puro y eficaz. Estas placas se caracterizan por ser de un color negro intenso, por su eficacia y porque tienen una vida útil de hasta 25 años.
• Policristalinas: Estas son las más conocidas popularmente, ya que son las placas solares azules que acostumbramos a ver. Estas son más baratas ya que rinden menos que las anteriores, aunque en la actualidad se ha avanzado bastante en mejorar su rendimiento. En estas los paneles se han obtenido fundiendo el silicio y vertiéndolo en moldes.
• Capa fina: Este modelo, al contrario que los anteriores, se trata de una lámina cortada a medida. Es más barata, ya que la forma de fabricarse en más sencilla. Esta forma de fabricarse le da una flexibilidad que le permite adaptarse a muchas superficies.
• Híbrida: Este modelo de panel solar combina las dos energías solares, la energía solar térmica con la energía solar fotovoltaica. Están fabricados de manera que puedan aprovechar todo el espectro solar para transformar así la luz en electricidad y el calor en energía.

Según las características de la instalación, del espacio, de las especificaciones del cliente o del presupuesto del que dispongas, se puede solicitar unos u otros paneles solares a la hora de trabajar con una empresa instaladora.

Al elegir a Solarama como tu socio solar, nos encargaremos de todos los aspectos de tu instalación, desde el diseño, la financiación y las garantías, hasta la legalización y tramitación de estas ayudas, y el seguimiento de la operación correcta y optimizada durante los años posteriores.