Instalación de placas solares en comunidades de vecinos
- Post by Solarama Energy Solutions
- May 04, 2022
Cada vez más españoles deciden pasarse al autoconsumo solar debido a los altos precios de las facturas de la luz. Viviendo en un país en el cual nos beneficiamos, de media, de 2.000 horas de luz diarias, realizar una instalación de placas solares en las viviendas es muy rentable. Pues, esa inversión inicial, en un periodo de entre 6 y 8 años está amortizada, además de todas las subvenciones y ayudas que están en marcha para impulsar las energías renovables en España.
Pero esto no se aplica, únicamente, al autoconsumo residencial, si vives en un piso en la gran ciudad, en un piso en las afueras o en un bungalow cerca del mar, también puedes instalar placas solares de las que beneficiarte y ahorrar en la factura de la luz. ¿Cómo? Instalando placas solares en todo el edificio para la comunidad de vecinos.
Placas solares en comunidades de vecinos
¿Sabías que existen ayudas a la instalación de placas solares en edificios de viviendas? Pues sí, al igual que existen ayudas para instalar placas solares en viviendas unifamiliares, también existen para instalar placas solares en comunidades de vecinos. Esta medida viene recogida en el plan de ayudas Next Generation lanzado por la Unión Europea en 2020, con la idea de ayudar a los ciudadanos de todos los países europeos a impulsar las energías renovables. En este marco, España lanza el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia donde se encuentran recogidas estas subvenciones. De este modo, los propietarios de viviendas en comunidades de vecinos no se ven desamparados si quieren realizar instalaciones fotovoltaicas, sino todo lo contrario, el estado busca impulsar más esta práctica.
La instalación de placas solares en una comunidad de vecinos puede servir para subsanar los gastos comunes de la comunidad y, de igual forma, se pueden instalar paneles solares para cubrir las necesidades energéticas de cada vecino. La inversión a la hora de instalar placas solares en un edifico siempre será menor que cuando se realiza una instalación por cuenta propia, ya que, los gastos se dividen entre más personas. De esta forma, todos los propietarios del edificio se beneficiarían de la instalación de placas solares ahorrando en la factura de la luz, tanto en sus gastos personales como en los comunes.
¿Cómo funciona?
En primer lugar, habría que saber el espacio del que dispone el edificio para realizar la instalación. El espacio que se suele utilizar es la azotea o los espacios comunes, que estén en desuso por la comunidad, y que presentan las características adecuadas para colocar la instalación. Según el espacio del que disponga el edificio, la instalación puede servir para proporcionar energía a todos los vecinos o para proporcionar energía a las zonas comunes.
Para realizar una instalación fotovoltaica en un edificio de vecinos la aprobación en junta del proyecto debe contar con el voto favorable de un tercio de los vecinos. Aquellos vecinos que no quieran participar no recibirán la energía de las placas solares, ni pagarán la instalación, sino que se quedarán fuera del proyecto.
La energía generada por las placas solares se distribuiría por todos los propietarios del edificio que decidieran participar en la instalación. Esta distribución de la energía puede ser acordada o no:
- Si es acordada, los vecinos pactan el porcentaje de la energía generada que se distribuye entre los propietarios; puede ser un pacto según la inversión que aporta cada vecino, según el consumo de cada propietario o según otro criterio que acuerden los propietarios de la instalación.
- Si la distribución de la energía no es acordada el reparto se realizaría en función de la normativa RD 244/2019, que dice que el reparto de la energía se dará en función de la potencia contratada.
En el pre-estudio que hará la empresa instaladora, se reflejarán los requisitos energéticos de los propietarios para hacer la dimensión adecuada de la instalación. Por tanto, a la hora de realizar el pago completo, este también se puede dividir, de manera que cada vecino invierta proporcionalmente a la potencia contratada para su vivienda, el número de habitantes de la vivienda o cualquier otro factor.
Tanto para el acuerdo de inversión inicial, como para el acuerdo de la distribución de la energía generada, siempre es recomendable dejarlo por escrito.
Finalmente, si la instalación no se compone de baterías y, en el caso de que se genere excedentes de energía, al igual que en una instalación de autoconsumo residencial, se puede obtener una compensación económica por verterlos a la red eléctrica. De manera que, una instalación fotovoltaica no supondría únicamente un ahorro en la factura de la luz, sino que, a su vez, los vecinos pueden recibir un beneficio económico una vez amortizado el coste inicial de la instalación.
Pasos para realizar la instalación en la comunidad de vecinos
- Conseguir el acuerdo vecinal: ponerse de acuerdo entre los vecinos de lo comentado anteriormente (distribución de la energía por propietario y cuantía del pago por propietario) y que conste en acta.
- Contactar con la empresa instaladora: contactar con la empresa que se encargará de la instalación.
- Solicitar los permisos de la instalación: de este trámite se puede encargar la empresa de instalación, según la que contraten, si no, también los puede realizar la comunidad de vecinos.
- Solicitar las subvenciones: si la comunidad de vecinos decide acceder a las subvenciones, este es otro de los pasos que tendría que realizar. Aunque, como en el paso anterior, los trámites de acceso a subvenciones también los pueden realizar las empresas instaladoras de placas solares, según la que contraten.
Al elegir a Solarama como tu socio solar, nos encargaremos de todos los aspectos de tu instalación, desde el diseño, la financiación y las garantías, hasta la legalización y tramitación de estas ayudas, y el seguimiento de la operación correcta y optimizada durante los años posteriores.